El pasado 18 de Noviembre hemos sido convocados por el Equipo de gobierno, para
facilitarnos un ejemplar del próximo PGOU previsto en la nueva aprobación inicial. Se ha
recibido explicaciones por la Delegación de Urbanismo y el Equipo Redactor, por lo que
los esfuerzos por facilitar la máxima información es a priori de agradecer a diferencia de
etapas anteriores.
Es el PGOU que más veces ha sido sometido a información pública y que demuestra
con la disminución notoria de alegaciones, que se va por el buen camino. Con la consulta
realizada por Urbanismo a la Junta de Andalucía, en relación a la anulación del PGOU
de Marbella por el Tribunal Supremo, la piedra está sobre el tejado de la Dirección
General de Urbanismo de la Junta, que tendrá que aclarar los pasos a seguir.
A la espera de un estudio más pormenorizado, el PGOU de Chiclana sigue teniendo
como asignatura pendiente el problema de la inundabilidad y pasa de puntillas por la
aplicación del famoso Decreto 2/2012; pero la impresión general es que se ha vuelto a
mejorar el proceso de regularización, porque aunque el reconocimiento parcelario con el
establecimiento de diferentes zonas de ordenanzas en cada Área de Reparto ya estaba
previsto anteriormente, se vuelve a reconocer más edificaciones por las alegaciones
presentadas y nuevos estudios realizados.
Los aprovechamientos medios sufren cierto aumento y la edificabilidad también aumenta
en parcelas de 1.000 y 1.500 metros cuadrados. El optimizar las cuencas hidrográficas
hace posible una reducción fuerte en los costes previstos de alcantarillado y pluviales.
Las transferencias prácticamente quedan reducidas al mínimo o son nulas. Se permite
una Urbanización “mas blanda” pero integrada en la Ciudad, y lo más importante, es que
se ha conseguido que el 100 % de las cantidades que se aporten por el 10 % de
compensación, vuelva íntegramente a la urbanización. Eso significa que el dinero que se
entregue al Ayuntamiento, será invertido en el extrarradio, disminuyendo los costes de
urbanización, vieja aspiración por fin conseguida por parte de esta Plataforma.
El PGOU, no pondrá problemas para iniciar el proceso de regularización incluso por
calles, Agrupaciones de vecinos, Asociaciones o Comunidades, posibilitando la
contratación de servicios básicos con figuras de AFO, tanto en suelo no urbanizable,
como urbanizable, con el condicionado de la proximidad.
La elaboración de la Ordenanza de Regularización de las viviendas, será la piedra
talismán, donde aparecerán las fases, mecanismos y los valores de las Unidades de
aprovechamiento y por ende los costes previstos para poder Regularizar.
Lo que se considera como imprescindible para que el proceso tenga éxito, es que esa
Ordenanza sea consensuada, posibilite el faseado y el abono de las cantidades y
obligaciones a largo plazo, mediante cuotas en recibos de Chiclana Natural a semejanza
del canon. En definitiva un nuevo paso hacia adelante.